Publicado en Fanfics

Amor: cuarto drabble


 

 

Por esa parte de mi, que odio tener

..:: 4 ::..

 

 

 

Las luces de neón y la música que hacía retumbar a los parlantes.

 

Las personas que bailaban restregando sus cuerpos en una danza, que de danza no tenía nada. Mientras la voz de los cantantes apenas se entendía. Yunho estaba castigado, pero para eso estaba Goongsu, para servirle de excusa de estudios mientras él salía de fiesta.

 

Su fiel amigo, que nunca lo abandonaba.

 

Claro, hasta que encontraba a una tipa con la cual restregarse toda la noche. No importaba, por que Yunho solo quería esta noche para beber. Y enterrar sus memorias, tan hondamente, que contaran únicamente como una pesadilla.

 

Tenía ganas de bailar, si, muchas ganas de bailar. Pero estaba ya tan lamentablemente ebrio que no podía darse el lujo de hacer el ridículo. Y sin embargo cuando giró, con una sonrisa bobalicona en la boca, sus ganas se fueron al piso cuando la vio.

 

Yoona esta ahí, tan hermosa como costumbre, sentada en una de las mesas rodeada por mucha gente, que seguramente serían sus amigos de universidad. Pero ahí estaba uno de esos muchachos que a él nunca le agradó, pasando un brazo por encima de los hombros de su bella Yoona, y a ella parecía no molestarle en absoluto.

 

La furia interna creció, hasta que sus ojos captaron a Jaejoong, en medio de la pista, caminando hasta él, con una sonrisa en el rostro, una botella de cerveza, la ropa algo desacomodada por estar bailando y leves rastros de sudor por el calor que hacía ahí.

 

Sus ojos lo hipnotizaron, y casi ni pensó cuando lo tuvo frente a él.

 

—Es un lunes por la noche, ¿qué hace el perfecto Yunho por aquí?

 

Jaejoong estaba tan arrebatadoramente sensual que Yunho quiso golpearse por pensar así de un chico, así que solo desvió la mirada y bufó. Como si su presencia le fuera desagradable.

 

—No sabes nada de mí, como para aseverar algo.

—Oh, se lo suficiente…

 

Lo observó beber, lo poco que le quedaba de cerveza. Y esos ojos jamás lo abandonaron. Brevemente Yunho vio a Yoona, ella reía y él solo apretó sus puños, pero por supuesto Jaejoong volvió a desconcentrarlo.

 

—¿Qué haces?

—Sígueme.

 

Jaejoong jalaba de su brazo, y Yunho miraba de un lado a otro, algo incómodo por que alguien notara aquello. Pero cuando cruzaron la puerta y el baño se encontraba lleno de tipos que se chocaban contra las paredes por la ebriedad. Él se soltó discretamente.

 

—¿Otra vez despechado por tu ex novia?— Jaejoong incluso movió un mechón de su cabello. –Eres patético.

—Ya te dije que no soy gay.

 

—Yo tampoco, solo me pareces entretenido.

 

Jaejoong sonrió. Y Yunho solo giró un poco al ver como el grupito abandonaba el baño. Situación que Jaejoong aprovechó para jalarlo de la camisa a uno de los cubículos, cerrando la puerta. El movimiento fue tan rápido que Yunho se mareó, todo el licor dentro de su cuerpo solo lo confundió.

 

—No, ya te dije que…

 

Pero Jaejoong fue hábil con sus manos, por que desabrocharon su pantalón con tanta destreza que pronto sintió esa cálida mano sobre su miembro. Presionando apenas. Y la vio otra vez, esa sonrisa odiosa, prepotente y sexy.

 

—¿Quieres que deje de tocarte?

 

Yunho solo mordió su labio, no quería responderle, no quería ni siquiera demostrar lo mucho que se estaba excitando, pero su cuerpo traicionero como siempre, logró que Jaejoong sonriera un poco más.

 

Se pegó contra la pared, tratando de sostenerse por las pequeñas vigas que había, cerrando los ojos cuando la mano de Jaejoong empezó a subir y bajar con rapidez. Y apretó más, mordió su labio incluso. No quería gemir.

 

Pero la mano de Jaejoong se movía cada vez más rápido y su pulso acelerado lo hacía incluso elevar su cuerpo inconscientemente. El cuerpo de Jaejoong se pegó al suyo y gimió. Tapando con una mano su boca.

 

—Eres extremadamente terco, ¿no Jung?

 

Abrió los ojos, vio esos ojos de Jaejoong, que lo miraban fijamente. Y fue tan excitante sentir la mano de Kim y al mismo tiempo no despegar sus ojos de él, sentir las sacudidas de propio cuerpo mientras permanecía hipnotizado a ese rostro. Como si fuera lo más soberbio que hubiera encontrado.

 

—¡Yunho! ¿Estás aquí?

 

La voz de su amigo lo hizo tensarse, pero Jaejoong solo sonrió.

 

—Goongsu… Si, aquí estoy… Yo… salgo en un rato…

—Oh, que bueno. Pensé que te habías ido sin avisar. Te espero en la entrada. Ya es tarde, y recuerda que mi madre dijo que máximo hasta la una.

 

Yunho trató de respirar un poco, mientras Jaejoong continuaba, cada vez más rápido y la presencia de su amigo no disminuía la excitación. ¡No lo hacía! Y Yunho estaba a punto de enloquecer.

 

—De… acuerdo.

 

Luego de dos mortíferos segundos, Yunho supuso que Goongsu ya se había marchado, pero Jaejoong solo cerró un poco más su mano y Yunho gimió. Fuerte y desgarradoramente, con la cabeza hacía atrás y Jaejoong sonriendo descaradamente.

 

—Siempre es un placer… verte, Yunho.

 

Jaejoong lamió uno de sus dedos, marcando otra imagen demasiado perturbadora en la mente de Jung. Y salió del baño, no sin antes volver a subirle el pantalón. Y medio limpiarlo con un poco de papel que había dentro.

 

Yunho se pegó a la pequeña pared en el cubículo, y llevó una mano a su frente.

 

Otra vez.

 

¡Había pasado otra vez!

 

Su ropa desarreglada, el olor a sexo, la música ensordecedora y Yunho solo negó vehementemente antes de lavar su rostro durante un par de minutos antes de salir de ahí, y tratar de ponerle una sonrisa a Goongsu. Y fingir, que en realidad nada estaba pasando en su vida.

 

 

 

“¿Por qué sigues mirándome?

Puedo sentir toda esa apasionada atención sobre mí.”

 

 

..:: To be Continued.. ::..

 

 

 

 

 

Bueno creo que este ha sido el más extenso que he escrito, y esto ya difiere por mucho de un drabble, así que vamos a dejarlo únicamente en capítulos cortos… ;D

Por cierto la canción es So Hot de las Wonder Girls.

 

 

 

Publicado en Fanfics

Amor: tercer drabble


 

 

Quiere parecerse un poco, a la indiferencia

..:: 3 ::..

 

 

 

El día lunes, un día después de aquella desastrosa fiesta.

 

Yunho ni siquiera tuvo tiempo de pensar bien las cosas. Solo llegó a su casa, se justificó bajo la excusa de haberse quedado en la casa de un amigo. Recibió un regaño por no avisar, fue castigado pero poco le importó, de todas formas muchas ganas de salir de casa no tenía.

 

Y miró el techo de la habitación como la cosa más importante de la vida.

 

Su padre llegó a importunar, su madre a tratarlo como si estuviera enfermo y necesitará algún tipo de sopa caliente. Y su grito, fue el detonante para que su padre le creyera que eso pasaba con los excesos, que seguramente había estado bebiendo, fumando y metiéndose hasta droga.

 

Yunho reaccionó molesto. Despotricó contra su padre, por no confiar. Por tratarlo de esa forma, y la pelea terminó en su padre cerrando la puerta con fuerza. Yunho al menos sentía un poco de furia fuera de él.

 

Y ya en la noche, disculpas mutuas. Su fin de semana había sido un asco, uno completo. Pero al menos no estaba peleado con sus padres. Y entonces, ahora, Jaejoong volvía a atormentarlo, con esa sonrisa de victoria que se había quedado grabada en su memoria.

 

Él no tenía problemas con las personas que fueran gay, es solo… que él nunca pensó que lo sería. Luego desechó la idea, era un adolescente, uno a punto de terminar el instituto. Estaba experimentando, estaba despechado. Todo eso sumado daba un cúmulo de emociones que volcaba todo a un momento de pasión descontrolado, que no necesariamente lo hacía gay.

 

Y con esa conclusión en la cabeza, cerca de las dos de la madrugada, Yunho pudo al fin dormir.

 

 

 

 

Llegó un poco tarde, sus amigos lo saludaron. Y todo fue normal.

 

Incluso cuando vio a Jaejoong todo fue más normal aún. Jaejoong entró con una sonrisa enorme en el rostro, con las manos en los bolsillos de su pantalón. Caminó por el pasillo sin problemas, sin detectarlo, sin mirarlo siquiera.

 

¡Yunho se sintió tan aliviado!

 

El barullo cuando Jaejoong se acercó a sus amigos, como cada mañana. Todo era tan normal, que Yunho incluso podía sentir que todo había quedado atrás. Que todo había muerto en aquella noche de sábado y él no tenía que preocuparse más.

 

Volvían a lo mismo de siempre, a la candidatura para Rey y Reina del baile. Lo que le hacía recordar que al haber terminado con Yoona, él no tenía con quien ir. Y entonces denotó que por ello la mayoría de las chicas hoy se portaban tan amables, sonrientes e incluso con indirectas extrañas. Supuso que conseguir pareja no sería problema.

 

Pero Yunho quería eliminar el recuerdo de Yoona, y el recuerdo de Jaejoong de paso. Solo por seguridad. Entonces quería a la chica más linda que encontraran sus ojos ese día. Y sucedió, durante la hora del almuerzo.

 

Sunha, era oficialmente la muchacha más hermosa del instituto. Y tenía un record de haber rechazado a más de quince chicos desde que empezó toda la locura del baile. La vio entrar, tan bella, tan sonriente, tan imponente. Sería perfecto. ¡Ella era perfecta!

 

—¡Yunho! Al menos disimula.

 

Observó a su amigo que sonreía divertido, mientras él cual idiota se había quedado con la charola del almuerzo, observándola pasar. Sunha le regaló una sonrisa y Yunho comprendió que ella esperaba ser invitada por uno de los chicos más apuestos y populares. Y él encajaba perfectamente con esa descripción.

 

Él le sonrió también. Y todo el mundo en la cafetería comprendió, que si Yunho preguntaba, sin fallo Sunha aceptaría. Y serían la pareja perfecta en el baile.

 

 

 

 

Para la hora de la salida, Jaejoong volvía a ser su dolor de cabeza personal.

 

Él muy imbécil estaba de lo más sonriente con Sunha, ¡cuando antes ni siquiera la había detectado! O al menos eso suponía él, por que nunca los había visto juntos. Pero ahí estaba, sosteniendo las delicadas manos de Sunha, con su estúpida sonrisa en el rostro.

 

—Dicen que la invitó al baile después de la hora del almuerzo.

 

Yunho apretó los puños molesto, Sunha era su escape, su pareja perfecta. ¡Y el muy…!

 

Prefería no pensar más en ello, por que eso representaba tener a Jaejoong nuevamente en la cabeza. Había preparado invitarla a tomar algo después de clases a una linda cafetería y luego invitarla al baile. Pero solo suspiró, con una sonrisa pequeña en los labios.

 

—Está bien, no es la única chica en el instituto. Mañana buscaré con quien ir, y si no, siempre puedo invitar a una amiga de otro instituto.

 

Sonrió confiado, escuchando las palabras de sus amigos, diciéndole que era bueno que estuviera intentando superar a Yoona, concentrándose en otra cosa. Y por supuesto hablaban de la envidia ‘sana’ al tener él tantas amigas realmente bellas.

 

Pero Yunho solo suspiró, no debía pensar más en eso.

 

No en Yoona, no en Jaejoong y ahora no en Sunha y por consecuente, no más en Jaejoong otra vez, como si de un circulo vicioso se tratara.

 

 

 

“Desde que he vuelto a casa, mi cuerpo ha sido un desastre.

Así que deja de hacerme sentir como un idiota”

 

 

..:: To be Continued.. ::..

 

 

 

Bueno, la canción es Valerie  perteneciente a The Zutons.

Olvidé colgarlo ayer.. xD

Para la noche publicaré el que toca el día de hoy. Espero les guste. =D